Pastor anuncia la creación de un “plan de contingencia” para actuar ante episodios críticos como el de La Encina

El concejal de Ciclo Hídrico, Antonio Pastor, ha comparecido públicamente para informar al detalle del problema de abastecimiento que ha afectado a la pedanía de La Encina así como de las posibles medidas que se pueden tomar para evitar que vuelva a suceder algo así en el futuro.
La bomba del pozo del Rocín, el único que abastece a la pedanía, falló a las 2 de la madrugada del jueves 21, aunque se detectó más tarde porque mientras quedó agua en el depositito el suministro funcionó sin problemas. A las 7.45 era notificada la avería a Aqualia, que detectó que el transformador que daba energía al pozo (externo, y propiedad de Iberdrola) se había quemado. Tras reparar Iberdrola el mismo y volver a conectar la bomba, se vio que seguía sin funcionar, posiblemente dañada por una subida de tensión, por lo que hubo que extraerla (una operación complicada que requirió una gran grúa para extraer 250 metros de tuberías y finalmente la bomba en sí), siendo enviada para su reparación a unos talleres de Murcia, y estando reparada, de vuelta e instalada sobre las 23 horas del viernes 22.

No obstante, en ese momento se detectó poca presión en algunas zonas de la pedanía, debido a que las tuberías de conducción tenían suciedad a causa de las obras del AVE. Al vaciarse las tuberías y volver a llenarse de agua posteriormente, esas piedras se movieron y obstruyeron parcialmente el conducto, por lo que hubo que purgarlo y limpiarlo para despejarlo totalmente. Finalmente, sobre las 14.30 horas del sábado, el suministro había vuelto a la normalidad en toda la pedanía, “tras un trabajo intenso y que difícilmente podía haberse resuelto en menor tiempo”, decía Pastor.

Solución de emergencia
El edil subrayaba que “en ningún momento ha llegado a estar La Encina tres días sin agua” y recordaba que desde el primer momento, en coordinación con el panadero y la asociación de vecinos, a los que daba las gracias, se habilitó en primer lugar un reparto de garrafas mientras llegaba el camión-cuba para abastecer a los vecinos, a algunos de los cuales reprochaba su conducta, “pues hubo gente que retiró garrafas sin permiso en lugar de acercarse al camión, cuando esas garrafas eran para las personas con problemas de movilidad”, apuntaba.

Soluciones definitivas
Tras este episodio, explicaba Pastor, el ayuntamiento estudia las opciones para evitar que vuelva a pasar algo así, solución que no será sencilla “pues La Encina está fuera del perímetro donde tienen sus pozos las Comunidades de Regantes de Villena, siendo la fuente más cercana una planta de embotellamiento en Fuente la Higuera”.

Por ello, se baraja tanto recuperar los dos depósitos pequeños de La Encina (junto al cine y en la plaza del barrio alto), ahora en desuso, como facilitar la inyección de agua al depósito actual mediante camiones. El problema que ha sucedido ahora es que el camión-cuba de 25.000 litros era demasiado grande para recorrer el camino hasta el depósito y dar la vuelta allí tras verter el agua. Por ello, una opción sería “mejorar el camino y construir una explanada para facilitar el paso de camiones grandes o asumir que tendrían que ser camiones más pequeños (de 12.000 litros) los que tendrían que estar todo el día haciendo viajes, pues la capacidad del depósito es de 400.000 litros y el consumo medio diario de La Encina de 300.000.

En cualquier caso, concluía Pastor, “se va a trabajar en la realización de un plan de contingencias para evitar en el futuro momentos críticos como este, que no obstante se ha salvado del mejor modo posible”.